jueves, 8 de noviembre de 2012

-Tengo frío...
-Si pudiese estar ahí, te abrazaría, lo sabes.
-Ven, por favor, que con saberlo no me basta. Me congelo sin ti...






































-Hola pequeña, he venido a hacerte feliz, y a que me hagas feliz.

-¿Qué haces aquí?
-¿Cómo que qué hago aquí? ¿No recuerdas aquel día que me dijiste cuantísimo frío tenías? Sé que he tardado, pero tenía esperanzas de que aún no te hubieses congelado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario